giovedì 30 gennaio 2014

Una parte





Una parte se mete en mi cabeza,
Otra parte se mete entre mis piernas,
sacude mis ganas y me quita la razón.

Es casi mediodía
para el sin sentido,
para no guardar la formalidad,
es demasiado temprano
para desear lo imposible.

Una parte se mete en mi cabeza,
me altera y me agita,
grita que te busque,
que te coma todo.

Otra parte se mete entre mis piernas,
manosea tu lengua mi clítoris,
mete las manos en mi sexo,
hace que me moje,
que no piense es
mediodía.

Hay que trabajar,
pero esas partes tuyas,
se meten más en mi,
y follan mi lógica
tradicionalmente reprimida,
insaciable de ardores
espero tus besos.

                                     Hercilia Gato 014´

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venerdì 24 gennaio 2014

Sólo una vez



Sólo llamo una vez
para no despertar sospechas,
para no desdoblar
la cama en que duermes.

Para no despertarte,
no arruinar tus atardeceres
ni interrumpir tu paso presuroso,
abotagado de mundo, colorido de
ideas,
Naufragio de sin sabores.

Sólo te llamo una vez
para no agitar tu conciencia,
para no perturbar tu líbido,
para no trastocar tus pesadillas,
que tus demonios
sigan en paz al lado
de mis furias.

Sólo te llamo una vez
y mientras suena el celular
imagino si no respondes,
deseo que no respondas
para dejar de insistir.

Luego me voy a la cama,
para seguir desnuda
entre tus filias,
atada a la cama
con tus deseos
que abren mis piernas
mientras entras y te mojo,
mientras escurre tu delirio
entre mis labios,
tu semen en mi garganta.

Luego me vuelvo a mojar,
camino agitada entre tu pecho,
subo como gato en tu falo,
luego vuelvo a existir,
después que te has venido.

Sólo llamo una vez,
después desaparezco
para volver a dormir
contigo,

Que la oscuridad no se entere
que somos amantes.

                                          Hercilia Gato 014´

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venerdì 17 gennaio 2014

Todo se reduce al amor



Todo se reduce al amor, a esperarte, pensando en mil cosas en lo que llega la hora de caminar bien. Dividiendo temas, buscando conflictos, sabiendo de tí y de mí, como si nada cambiara.

Como si todo fuera así, tal vez así quiera que sea,
Llega la madrugada y pienso en portugués, en los lirios acuáticos de las tantas lagunas contaminadas que he visto.

Pienso en las paletas de nuez de Xochimilco, en ese señor que me la vendió mientras niñas pasaban súper cobijadas del frío, yo titiritaba emocionada viendo la iglesia, pensando en la hora de que comiéramos la barbacoa de borrego, que no recuerdo el lugar pero sí los olores. El olor de esas nueces garapiñadas del tianguis que se pone atrás del Nacional de Neurología, o la birria y el queso panela del tianguis de Ermita, y esas carnitas que están por Izazaga, o los suspiros de la dulcería cercana al Washington, y de plus los museos.

El olor de los tlacoyos que hacen atrás de la catedral, o afuera de la casa de la Tía Mary, los de frijol negro, requesón y haba, con esa salsa roja bien picosa. Pienso en esa tarde al lado de mi madre que se atacó de la risa de que soy una papa para leer números en romano, pero a quién se le ocurre que se cuenta así en estos tiempos, yo solo veo equis ele palito palito palito ce y sepa qué más. Recuerdo mucho el cuadro de esa iglesia la de Tlalpan por la que se rieron de mi.

También recuerdo El Popular y las tortas de milanesa  abajo de la Cánada grasosas pero sabrosas, pero no era de eso de lo que iba a hablar, en realidad quiero decirte que todo se reduce al amor, a las esperanzas de lucha que tengo después de caminar, después de cifrar, sumar y restar tantos días de cama, y ahora en muletas, para el lunes me digan que asiente los pies y unos días más de recordarle a mis piernas que tienen que ir hacia ti.

También recuerdo El Arenal, ese pueblto antes de llegar a Playa Paraíso, ese lugar tan escondido y que sí es un paraíso para los lugareños y para los que quieren ir a drogarse libremente, playa Paragrifo que le dicen, pero recuerdo la laguna, la tuvimos que cruzar y fui feliz en otro mundo con el mar al pie, entrevistando gente a los lugareños, nadando y escapando de la realidad, todo se reduce al amor, verás.

Luego recuerdo la Sierra Negra con Marie y las italianas Giorgia , las francesas Charlote Walsh y la canadiense que venían a hacer su servicio, cómo nos quedamos atoradas en la carretera rumbo a la comunidad poblana a la que subiríamos, y en ese viaje recuerdo mi encuentro con las semitas, ah el sabor de una semita poblana, al lado de la carrretera, con el frío amoratando mis manos. Después fue el atorón y pasamos toda la noche adentro de la camioneta con la tormenta encima, sin agua, sin qué comer, sin ir al baño, viéndonos las unas a las otras, Marie fumando pese a su embarazo de 5 meses y estresada, pero todas emocionadas por la aventura, se me reventaron mis zapatos y como buena costeña subí a pata raíz.

Luego el frío que te destroza, mucho más frío que en los Valles Centrales de Oaxaca, de Zaáchila y Ocotlán del Progreso, del teljate y las tlayudas frías que comí, un frío pero, que destrozaba, mis manos amoratadas, sin circulación, sin quererme mover, viendo a una niña de 14 con un bebé de 2 años, contenta de ser madre, la gente sin agua, cuidando el agua, negándote agua, preferían darte el café chirrio al agua porque casi no había, la mujer cocinando con el gato al lado de la lumbre, pobre gato, pero bien querido, todo se reduce a amor.

Luego pasa que las vivencias vuelven, golpean en la cara como la vez que los profes de la CETEG casi me linchan porque dije que era de prensa, ese 20 de noviembre histórico, pensé histórico e histérico, pero siempre gana una marcha más grande, eramos miles, grité a más no poder y en todo el camino salían conocidos de luchas antiguas, es que verás, todo se reduce a amor.


Después la vida que me tira de un lado a otro, desde Puebla a Cancún, a Yecapixtla, a Zacatecas y San Luis Potosí de paso en un lugar en carretera que comí las enchiladas potosinas, luego en Querétaro y comí enchiladas queretanas, luego en Tlapa, luego en La Morena, Juluchuca ahí comí jabalí, el mejor que hizo Olga, aunque en La Morena lo hicieron carnitas, luego el rostro de Yaz, de cuando tenía como 8 años y ahora tiene 14, luego en Taxco, n El Cerrito, en Cacahuatepec, en Santa María, Puebla, en el foro de Wiricuta, en ese restaurant chic y retro escondido por el Hemiciclo a Juárez, con ese mesero que regañó a mi hermana jaja. Todo se reduce a amor, verás.

Después en Cuautla, en el Tepoz, en Oaxaca, en Ciudad del Carmen, Acapulco mi vida y mi corazón, en Las Ollas, Puerto de las Ollas y Las Palancas, en Real de Guadalupe, Santa Rosa de Lima, la Papanoa vetada, el pueblo, no el lado hotelero que defienden los empresarios sin escrúpulos y agachones. Con esa langosta de a kilo que me dió el Gordo, o allá arriba donde vimos cómo las milicias también asistieron a esa plática de erechos humanos que dieron los compas (Ahora no digo quiénes por seguridad, obvio) y porque todo se reduce a amor.

A amarte y desearte como amo a nuestra gente, a nuestro pueblo como se ama a la vida en cada palmo que respiras, cada despertar que es aventura, porque sé mis piernas me llevarán a ti y a ellos, a esas comunidades donde faltan medicamentos, donde los usos y costumbres enseñan a las niñas que deben obedecer sin protestar al ombre, ser madres y no pensar en estudiar ni en superarse.

Todo se reduce a buscar la libertad porque esto que siento y escribo es parte de donde vivo, de todo lo que percibo y cruzo, de todo y de todos, pero antes, contigo, a tu paso y porque todo, amor, todo simplemente se reduce a éste amor que siento por ti, por ellos, por nosotros, por todos. Todo se reduce a amor, amor.

Hercili Gato 014


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giovedì 16 gennaio 2014

Es un temor la lluvia






Es un temor infantil,
un simple temor,

pero la lluvia acelera mis sentidos,
hace que me ponga como gato espantado,
es sólo un temor
pero me hace huir.

Hace que me esconda bajo las sábanas,
que cuente los minutos,
es chistoso
porque puedo escribir de todo,
andar por la sierra escuchando historias
de terror.

Que los soldados no vigilan,
entran en las comunidades
y violan niñas, que castran a los hombres,
que prenden fuego a quien se les da la gana,
que torturan chicos,
son intermediarios de los sicarios,
que se roban la leche de los niños,
como esos monstruos de las películas de terror.

Cortaron el cartucho,
yo supongo lo recuerda Adelaido,
mientras nos contaban cuántos
pueblos de desplazados hay.

Es sólo un terror
que me recuerda el llanto de la niña,
esa nena que jugaba bajo la lluvia,
esa nena que el tío besó,
su lengua babeante como serpiente
en sus labios,
sus manos en sus pechitos,
incipiente, aterrorizada
bajo la lluvia.

Es sólo un temor,
una fobia que no me pasa,
algo insignificante para ellos,
para tí, para él.

La lluvia cae y destroza comunidades,
viene del cerro más lejano,
se pierde el maíz, el frijol,
la madre llora porque su hijo se ahogo,
los perros y gatos de La Pintada
se quedaron esperando a sus dueños,
maullando y ladrando, doloridos, hambrientos
y tan solos como el abismo,
al abismo nadie quiere ir.

Es sólo un temor,
un simple temor que me causa la lluvia,
no el agua, el agua no,
la lluvia que es mala, se hace tormenta,
tumba casas, lluvia mala,
mala lluvia que se ensaña con
los olvidados, no los pobres olvidados,
los olvidados y solitarios
que aún esperan el sol.

Es sólo un temor, lo sé,
no tiene caso repetirlo,
pero de cada en tanto me traga,
traga mi voz,
como a aquella chica que violaron
los que se decían revolucionarios,
como aquella mujer que
golpea el hombre de derecha,
no hay diferencia,
son simples hombres machos,
falocracia completa.

Es un simple temor, lo sé,
ahora baja la lluvia,
pero no para.

Hasta que no pare,
no se irá mi inmenso terror.

Es un simple temor,
algo insignificante
que me traga
cada tanto
que vuelve.

                                              Hercilia Gato 014´

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mercoledì 15 gennaio 2014

Insomnio

Arde mi cuerpo,
profundo arde,
no soporta las sábanas
ni las almohadas,
arde la piel.

Un resplandor se abre,
tu cuerpo me besa, me recoges
etre tus piernas,
tiemblo, exploto, vuelvo a soñar,
o sólo fue ilusión,
no sé.

Pero todo
es oscuro, incierto, es cierto,
despierto, no he dormido, sufro
insomnio, sufro de tí,
sin tí.

resulta que estás
muy lejos de mi cama.

Mientras tanto,
me quemo sin tí,
sólo anhelando-te.

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                                                         Hercilia Gato 014´


domenica 12 gennaio 2014

Infierno



Su cuerpo es mi llave al infierno,
su gran verga es mi religión,
culmino con su semen resbalando
entre mis dientes.

Fantaseo y  escribo clichés
para que me diga
que quiere estar entre mis nalgas.

Mi cuerpo se deshace,
mi clítoris explota
cuando lo masturba con su glande.

Su cuerpo es mi paraíso,
yo sólo quiero
estar con él,,
venirme en sus pensamientos,
que
todo desaparezca,
todo sea nuestros orgasmos.

Tú, mi deseo.

Perviérteme.

                                                        Hercilia Gato O14´

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venerdì 10 gennaio 2014

Sueño 15





Yo me desperté en el sueño de Orfeo,
 tratando de asimilar que estaba despierta, o dormida,
me desperté entre la bruma y los consejos solares.
 Buscando redimir mis deseos,
no desear a veces, sentirme menos viva.

Giré en tu cuerpo
bajo el yacimiento de los cangrejos,
entre su música y la esperanza del mar.

Busqué tu mano tras las piedras,
ahí, donde duermen los caracoles,
donde nacen los peces
y follan las sirenas.

Yo me desperté,
cuando ya te habías ido
entre los brazos
del huracán que dejó
lágrimas en
la esposa del pescador,
en los brazos del niño que nunca
tuvimos.


                                                  Hercilia Gato 014´

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domenica 5 gennaio 2014

Apariciones





De repente extraño tu silueta
descarnada de hipocresías,
vestida de realidades,
de repente extraño tu voz,
concienia iluminada,
alunada que se cruza y gotea.

Profunda aparición
me somete a seguirte,
con las piernas cruzadas
y los brazos extendidos
como Dios manda
desde su cruz.

De repente apareces
en mi cuerpo
como lo sublime,
lo intocable,
lo intangible
y todos los ble
que quieras decir.

Luego tus manos me tocan,
presiento y siento que rompen mis faldas,
orilla de paraísos mojados
desde en medio de la pierna
hasta el último
suspiro humano.

Los pueblos te cuentan milagros,
las rosas bailan de rubores,
presagios de buenaventura,
risas de tertulia otoñal,
fuego que incendia las montañas,
agua que se deshace con tus besos,
me voy a venir si sigues así.

De repente entras, me abres, sales,
empujas, te vienes, tu lengua, en mi,
abajo, de lado, orgásmicos,
otra vez te vienes, así.

Despierto,
otra vez fuimos aparición,
latido extinto.

Bésame,
Háblame,
Me vuelvo a dormir.

Tu cuerpo es mi llama.

                                                           Hercilia Gato 014´

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mercoledì 1 gennaio 2014

Maullido



Me despierto entre la inconsciencia
y la conciencia,
no sé a dónde iré
después de desperezarme, después de comer
y acicalarme.

Mi saliva va ansiosa de romper la rutina,
sin embargo ellos insisten
en seguir en vertical,
en laberintos donde
la simpleza es su solución.
Carmesí fragancia
de voluntades dormidas.

Gato, gato, gato, gato, gato, gato,
me llaman gato,
me buscan gato,
piensan que voy.

¿A dónde?
Estoy condenado a no parar,
no me puedo detener,
brinco tejados, me llego
a dormir,
me agota l celo
de la medianoche.

Gato, gato, gato, gato,, gato, gato,
me dicen,
yo no los escucho,
porque sólo sé maullar.

Mi ronroneo
es la trampa
para que siempre me
adoren.

Mis ojos son el fuego
que te desnuda.

                                  Hercilia Gato 014´

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Miedos

Tengo las horas contadas, tan contadas, que no puedo ni cambiar mi testamento (sí, yo sí tengo testamento 27 años ha). Tengo mie...