lunedì 26 maggio 2008

El capítulo siguiente (Segundo encuentro)

El capítulo siguiente
(Segundo encuentro)


Es así como volviste aquí,
A la hoguera de la imagen .

Fue el extravío ,la pérdida, la búsqueda
De los lugares sin nombre donde las piernas
Se pueden acostar . El beautiful world
Donde los gritos son placer.


Tal vez la transición al cambio
De la pasión de la boca
A la democracia del amor.
La insaciable saciedad del ser
De amar sin rumbo ni guía.
Llevarte ,llevarnos al borde
De los precipicios donde se tira,tiramos
Al cuerpo desnudo.

Donde la boca se seca
Y los labios se cansan.
Una noche(esta noche no),
Un día(este día no),
El alma se cansará y el refugio
Será vapor. Una noche,
Un día, vendrá,(tal vez)
Y el beso se prolongará.

Son los rastros de los restos
De la rutina quebrada al fin
Por el quiebre de nuestras caderas.
La vida que no se detiene
Y nos da el regalo de la sorpresa .

Absorta, estoy absorta y enajenada
En el sueño que me resucita.
Lame mi vida, besa mis senos,
Acaríciame y ábreme al inicio de
Tu cuerpo.
Tirada ,desparramada se haya la lógica
Al inicio de la tarde.

Puedes,puedo,podremos decir amor?

Te escribo desde el desierto,el desierto
Donde tu eres el oasis.
Así,abajo,abajito del mundo
Tu ya no existes.
Es solo el no existir de la existencia
Lo que hace existas en este existir.

No hay tierra que se pise
Donde no vengas al razonar
Donde no se abandone la lógica
De la política del país
Y se corra a tus brazos.

Tu solo existes ahí,aquí,así:debajo de la rutina
Y siempre en el pensamiento
De las piernas mojándose.
Ahí,aquí,
Tu y yo seguimos juntos.


El desearte ,amarte, es la implicación
De seguir el desafuero forzado del amor.
Pero es un desamor que vuela
Por este cielo lleno de amor, tan dulce,
Intenso,sublime,agrio y cortante en las venas
Desde la aorta hasta la yugular vibrante .

El colapso sin dar del éter en tu piel.
Tu constante efimeridad deslizándose
Entre mis dedos, por el vientre, las piernas.

Has visto las mareas de Octubre?
Esto es una marea de Octubre
En plena primavera.
La tarraya de tu voz
Lanzada sobre mi.

Es el calor de la arena como tu cuerpo
Entregado ahí,en ese sueño sin atrapar.
Tiende tu red ,pesca mis sueños, toca mis mares
Antes de que llueva y yo pez me sumerja.
Clávalo, clava tu anzuelo sobre este pez.

Arriba de mi estas tu
Debajo de mi estas tu,
En medio de ambos : la zona abismal.
Es un soliloquio
Enloquecido de hojas repletas ,
Sobrepasadas de versos griegos.

Un campo de palomas volando
Y cayendo en la incertidumbre
De la espera del cazador.

Es una huerta de recuerdos
Y no me olvides con olor a copra
Frente ahí,al mar .
Es un camino de terracería
Donde no caben los pasos juntos,
Solo cabe la espera que lleva polvo,que se
Impregna en la lengua buscando
La piel.
Son deseos ,deseos turbios y titilantes
Como luciérnagas en la noche
Los que quieren rodear tu cuerpo.
Besos: millones de partículas
Que el soplo desta vida deja siempre
A tu lado sin que los veas .

En el libro de los muertos
Se inscribe nuestra historia,
En el mundo de los vivos
Se condena al suplicio
Todo dejo de pasión,todo respiro.
Es el mundo donde subsisten
Los submundos en que se esconde
Y crece ,y se recrea diario la maravilla
Deste sueño,esta somnolencia
Donde nuestra esencia brota,suda,ama
Y es libre .
Sabía que estaba perdida(siempre se sabe)
Que no había salvación(porque nunca la hay)
Después de emprender el juego del fuego .

Correría a otros brazos, otra cama,
Otra desnudez, otro beso, otro mirar, sonreír,
Otro sueño ,pero el cuerpo no responde ya,
Esta en la cuadraplejia del sueño.
Estática : estática y atrapada junto a ti .
Sabía ,nose en que momento
Que esto enredaría como enredadera
Mis caderas al enredo de tus besos.
Lo sabía ,siempre lo supe .

Lo he sabido siempre, lo se,
Que no hay desdicha ni dolor
Mientras la piel recuerde las caricias
Que nos dan.

Es esta desfachatez y cinismo
De entrega que hace mis senos vibren
Y se dirijan a tu mutis .
Ahí,aquí,solo existen estos quereres .

Ábreme las piernas, ábreme a tu mundo.
Ese universo donde se empapan mis ojos.
Ábreme tu mundo y chúpame el aliento
Que brota hacia ti, para ti .

Arropada en tu pecho desnudo
Cruzo una calle,un pueblo,una ciudad.

Arropada en tus ojos cierro
Los míos buscando manantiales,cascadas,
Ríos,una gota,tal vez.
Porque no se vive ni se muere
Hasta que no llega ese algo,alguien
Que te jala las vísceras y te agita
La conciencia .

No se vive ni se muere.
Es solo esto, el automatismo
En el teatro diario de la enajenación
Deambulando por la calle .

Encajona mis parpados,
Sostén mi sombra a la sombra
De tus días, circula por mis labios,
Deslízate en mi cuello , Estalla en mi,
Arriba ,de lado,o debajo de mi .
No hay continuación mi vida,
Porque todo continúa igual.
Continuo, seguido a cada momento
Soy eco que te sigue .

Marca el tiempo, róbame el espacio,
Mátales el aíre ,y elévame a tu continuidad.
Continua sobre mi que yo continúo
Deseando el deseo de tu piel.

Siempre, siempre eres tu.
Ardiendo,atravezado,excitando,
Siempre has sido tu.
Mi sueño amado, irreverente .


INTERMEDIO
No hay inicio ni final .
Que es esto que me tira
Y retumba a todo segundo?,
Que es esto adentro de la prohibición ?.
Esto que me gira ,rueda y evapora como
Flash,este juramento secreto
Ante una tumba sin cadáver ni vivo
Al que solo , solo puede ser un fantasma.
Este fantasma que besa y anda sin existir
Pero existiendo,aquí,esto se llama amor,
Lo se .
Lo he sabido siempre : sin la palabra confusión
Trasnochada aquí .
Pero no esta,nunca ha estado en su estar
Ni siquiera con estadía .
Se acaba,se extingue ese deseo,
Esa furia de no seguir la llamarada
Como las marismas ,el bosque, el vocablo
Florido, el filatelismo,la mariposa monarca
O el altruista ,el humanismo.
Espacio, un espacio dentro de la logística
De las realidades es lo que busca este sueño.
Pero en la búsqueda se queda .
Busco, te busca besarte frente a un ellos,
Un nosotros,te busca con palabra
Prolongación .
Eterno,te quiere eterno,aquí ,a mi lado,
Lado sin oscurantismo.
El sueño te busca,te busca
En ese pequeño lapso
Del despertar entrecerrado
Tras de ti .

Hercilia Gato 2004


Para : Eduardo Najera







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