domenica 23 febbraio 2014

Carta a la locura...



Un cielo se abre,
me deshace,
me abre, me funde, te fundes,
me abres, me chupas,
me comes, te como.

Me aventuro a desafiar
ese espacio infinto 
de tu aliento a tu sexo,
tu sexo que me atraviesa,
entra y me sume.

Oceano de éxtasis,
cielo de estrellas nos miran coger
mientras el mar rompe
en las piedras,
a su lado,
tu hermoso cuerpo me tumba,
me partes.

La playa que gime,
yo gimo, maúllo,
con tu piel que sabe a la arena.

Me haces explotar,
me vuelves loca,
estoy loca,
mi espalda espera tu lengua.

Mi boca espera la dejes
bajar presurosa 
a tu falo,
una vez, dos veces, 
tres veces, sin finl
quiero beberme
tu semen.

Una vez, otra vez,
sigue con tus dedos
adentro de mi sinfonía,
la cascada que te abro 
cuando tocas mi locura.

Soy una falocrata,
me gusta adorar tu verga,
que entres en mis caderas,
ahí, entres donde el prejuicio desaparece
y se expande el infinito.

Así,
adorando el exceso.

Estoy loca, lo has logrado,
me desquician tus besos, tus manos en 
mi clítoris, adentro de mi sexo,
tu aliento que me hace venir,
una vez, dos veces, tres veces,
doce, quince, veinte.

Ahora me acuerdo 
y comienzo a venirme.

He enloquecido 
con tu fuego y tu ternura,
con tu voz y tu serenidad,
todo tú me has enloquecido.

No me doy cuenta 
de lo que hago,
me corro al ritmo
de tus deseos.

No domino ya el arte 
de escribir,
vivo enterrada en tus fantasías,
por cierto que con tu verga
enterrada.

Húmeda y gozosa 
me contoneo arriba de
tus piernas,
tus praderas en las que 
me corro, 
tamaño gigante
de mis cometas,
explosión de luceros,
lluvia de asteroides,
caen mis sentidos
cuando me das a beber 
tu leche.

No me importa
si les gusta o no,
yo escribo 
porque estoy loca,
loca de ti,
para ti,
por ti,
por tu sangre bendita
que me sigo corriendo 
de acordarme de
tus besos.

De la medianoche casi
en que me traes
por la carretera
cogiendo mis risas,
mis latitudes que cambian
y explotan mientras me posees,
tú mi dueño,
yo no importa
ahora la equidad,
no me importa mientras
sepa nuestro deseo traspasa
el inframundo y
la novena dimensión
o si alcanza la treceava
cósmica.

¿O fue en la mañana?
¿Fue en la mañana que
me trajiste abierta por todo el camino
mientras manejabas?.

Yo no importa,
a quién le importa el yo,
si somos uno cuando nos besamos,
nos desatamos a caricias
y orgasmos en todo momento
y en todo lugar,
como ese Dios que adoran,
así nosotros,
nos adoramos,
nos amamos, nos mamamos,
nos penetramos,
nos dejamos vistos a la cara do mundo.

Con todo el mundo,
yo te veo en cada pareja que pasa,
eres todos mis hombres,
eres uno sólo, mi hombre,
el hombre que busco  loca,
locamente perdida entre 
la multitud.

Aguacero de distancias,
líbelula de espacios,
ráfaga de violetas,
explosion de fragmentaciones,
dolorosas, gemidas,
mételo otra vez, 
por atrás cariño,
por atrás no hace frío.

Estoy viniéndome en ti,
loca de deseos,
de que ya amanezca,
o mejor dicho,
de besarte antes de que amanezca.

No, es mentira,
no quiero besarte, 
quiero mamarte, beberte,
explotar a tu deseo,
quemarme con tus caricias.


Sí, 
estoy loca,
mientras la gente pasa,
yo pienso en ti.

Hay que enloquecer,
tú me haces venirme 
hasta enloquecer y
así te amo.

Escribiéndole 
una carta a la locura
que me da tu ser.

Bájame de nuevo 
las bragas, amor.

Yo pido eso,
tu semen escurre 
en mi boca.
                                  Hercilia Gato 014´


Nessun commento:

Miedos

Tengo las horas contadas, tan contadas, que no puedo ni cambiar mi testamento (sí, yo sí tengo testamento 27 años ha). Tengo mie...